El sindicato Solidaridad ha expresado su profundo rechazo ante la reciente decisión de la Diputación de Barcelona (DIBA) de destinar 200.000 euros al sindicato UGT para la organización de su 44º Congreso Confederal, así como los 120.000 euros adjudicados a Foment del Treball para la celebración de una gala de premios empresariales.
En un comunicado, Solidaridad ha calificado estas asignaciones como injustificables en un contexto de crisis social y económica, especialmente tras los estragos causados por la reciente DANA, que ha dejado a miles de familias en situación de vulnerabilidad. Según el sindicato, estos fondos públicos deberían haberse utilizado para responder a las necesidades urgentes de los afectados por esta catástrofe, en lugar de financiar eventos que no aportan soluciones reales a los problemas de la población.
La organización ha criticado con dureza tanto a los sindicatos tradicionales como a las patronales, argumentando que están desviando su propósito: «No es aceptable que, mientras miles de ciudadanos luchan por salir adelante, estos recursos se destinen a celebraciones y actos de autocomplacencia«, señaló Solidaridad.
Desde su perspectiva, lo que los trabajadores necesitan no son «congresos fastuosos ni galas empresariales que representan a una minoría», sino un uso responsable de los fondos públicos que impacte positivamente en sus vidas. «El dinero de los impuestos debe ser invertido en políticas que realmente mejoren el bienestar de las personas, no en financiar fiestas privadas», enfatizaron.
Solidaridad ha reafirmado su compromiso de luchar por un modelo sindical diferente, en el que los recursos públicos sean utilizados para beneficiar a los sectores más necesitados, especialmente en situaciones de emergencia como la actual. «Seguiremos trabajando para construir un sindicalismo que defienda de verdad a los trabajadores, porque ellos merecen una representación que priorice sus intereses por encima de los actos simbólicos y costosos», concluyeron.