El pasado fin de semana, la Ertzaintza logró impedir que tres jóvenes inmigrantes de 18 años violaran a una joven española en Vitoria, Álava. A primera hora de la mañana del domingo, una patrulla de agentes de ubicó en el lugar oportuno y en el momento adecuado. Fueron ellos testigos directos de una agresión sexual a una joven alavesa, que lograron impedir gracias a su intervención.
Después de una noche de fiesta, y con menos de seis grados de temperatura, la joven salió la mañana del domingo de un ‘after’ de la capital alavesa. Precisamente en este local la Policía de Vitoria había practicado una redadas pocos minutos antes.
Así, cuando aún permanecían en las inmediaciones, agentes de la Ertzaintza vieron cómo los inmigrantes sometieron a la joven con tocamientos sexuales y le impidieron huir. Fue entonces cuando los agentes intervinieron, evitando así una violación. La joven fue trasladada a un centro hospitalario mientras que los inmigrantes fueron detenidos.
Tutelados por la Diputación de Álava hasta hace pocos meses y todos ellos con antecedentes, estos inmigrantes de 18 años cuentan con un largo historial de lesiones, agresiones y hurtos. Pese a su detención, ya han sido puestos en libertad, y muchos vecinos de la capital alavesa temen que episodios como este se vuelvan a repetir.
