El joven antisistema y «okupa» se ensañó con Víctor y le dio una patada en la cara una vez que ya estaba caído en el suelo, según la juez.
La familia de Rodrigo Lanza, presunto asesino Víctor Laínez por el hecho de levar simplemente unos tirantes con los colores de la bandera de España, ha emitido un comunicado en el que cuentan la versión del detenido, que no va en la línea de la investigación judicial.
En el texto, señala que fue la víctima «quien le pidió que se aproximara para preguntarle de dónde era», y que una vez que le contestó que era de origen chileno le dijo «sudaca de mierda, vuelve a tu país». «Acabadas las consumiciones decidieron marcharse ante la actitud amenazante de Laínez», aseguran, antes de decir que «uno de los acompañantes le advirtió de que llevaba una navaja».
Comunicado de la familia y amigos de Rodrigo Lanza pic.twitter.com/ApajUQFhZb
— Mariana Huidobro (@MarHuidobro) 14 de diciembre de 2017
Asimismo, declaran que Laínez «llevaba una chaqueta negra cerrada y que en ningún momento Lanza pudo ver si llevaba tirantes con los colores de la bandera de España» y que su pariente, conocido antisistema y «okupa», «se defendió con sus manos del ataque con un arma blanca». «Esperamos tener la oportunidad de una defensa justa», finalizan.
Cabe señalar que la «navaja» no ha sido encontrada por los investigadores, que desmontan esta versión.
El auto por el que la titular del Juzgado de Instrucción número 6 de Zaragoza, Natividad Rapun, ha enviado este jueves a prisión a Rodrigo Lanza señala que el joven antisistema y «okupa» se ensañó con Victor y le dio una patada en la cara una vez que ya estaba caído y moribundo en el suelo.
Varios testigos han coincidido en señalar que el motivo de la agresión fue «el simple hecho de portar, en el legítimo uso de su libertad personal, unos tirantes con los colores de la bandera de España». La juez cree que fue el único móvil que llevó a Lanza a golpear a la víctima «por la espalda sin posibilidad alguna de defensa y utilizando al efecto un objeto lo suficientemente contundente como para provocarle una fractura ósea» en la cabeza que le causó una hemorragia y le afectó al cerebro. Según la autopsia, esta fue la «lesión principal y causa de la muerte».
«Le propinó fuertes golpes en la cabeza, quizá patadas, que le provocaron la rotura de los huesos propios de la nariz y zonas adyacentes», dice la juez. En este sentido, incide en la «gran intensidad traumática» de la agresión «tanto en la parte posterior como anterior de la cabeza».
Los investigadores aseguran asimismo que el cadáver de Víctor no mostraba indicio alguno de haber tratado de defenderse.
Delitos de asesinato y odio
La familia de Víctor Laínez se presentará como acusación particular en el juicio y pedirá para el acusado, Rodrigo Lanza los delitos de asesinato y odio.
El abogado de la familia de la víctima, Juan Carlos Macarrón, ha explicado que su objetivo es que le imputen a Lanza el delito de odio dado que «el origen de la agresión fue la exhibición de un símbolo legal como la bandera nacional». Ademas, ha aclarado que también tratarán de que le sea imputado el delito de asesinato, en vez del de homicidio, porque considera que existe «alevosía» en la agresión.
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