El presidente de VOX, Santiago Abascal, alertó en la infructuosa investidura de Alberto Núñez Feijoo de la posibilidad de que muchos trataran de convencer al líder popular de que «regrese a plan de intentar acabar con VOX».
Así, afirmó que el camino es el que empezaron a construir en los gobiernos de coalición y «buscar puntos en común y dejar para más adelante diferencias hasta que despejemos la gravísima amenaza de la autocracia de Sánchez«. «Lo digo porque sé que es una disyuntiva. Puede hacer eso o puede volver a partir del día de hoy, de los aplausos recibidos después de una investidura probablemente infructuosa, a abrir la puerta de su despacho a los que le van a susurrar con toda seguridad que regrese al plan de intentar acabar con VOX», agregó Abascal.
Abascal recordó el aliento del PP a la «campaña de demonización de VOX»que venía impulsada desde la izquierda durante las semanas previas al 23J. «Se lo advertimos durante toda la campaña, en público y en privado, les dijimos con rotundidad, en primer lugar, que la victoria no estaba hecha y, en segundo lugar, que nosotros no éramos el adversario Pero ustedes, empujados por esas oligarquías nostálgicas del bipartidismo, y por los odiadores de VOX que los hay en todos los partidos y en todos los medios, se dejaron llevar a una campaña desastrosa».
En este sentido, llamó al PP a aceptar que «VOX no es el enemigo y no va a desaparecer». «Regresen a la distancia infinita con los enemigos de España y de la convivencia», concluyó.