El periodista Pablo González, quien había sido detenido en Polonia en febrero de 2022, fue liberado el pasado jueves en el marco de un intercambio de prisioneros entre Rusia y Estados Unidos. La liberación de González, según comunicó su equipo legal, se llevó a cabo «por motivos humanitarios». La defensa también destacó que «las autoridades rusas han mostrado un genuino interés en resolver esta situación, a diferencia de otros que se han enfocado en criminalizar a Pablo González en lugar de defender y proteger sus derechos». Además de la intervención de los representantes de Vladimir Putin, algunos socios de Gobierno también respaldaron a González.
El Ministerio de Asuntos Exteriores español activó su servicio de Acción Consular para asegurar los derechos del ciudadano español detenido en un país de la Unión Europea. Mientras tanto, la izquierda política comenzó a presionar al Ejecutivo. Un mes después de la detención, una veintena de parlamentarios se manifestaron frente al Congreso para exigir la liberación del periodista. Los políticos, pertenecientes a Unidas Podemos, EH Bildu, ERC, PNV, Junts, CUP, BNG y Compromís, se ubicaron en la escalera de la puerta de los leones, mostrando carteles con la imagen de González y el hashtag #FreePablo.
González eligió al abogado Gonzalo Boye para su defensa. Boye, conocido por su condena relacionada con la colaboración con la banda terrorista ETA en el secuestro de Emiliano Revilla, actualmente enfrenta acusaciones de lavado de dinero para el narcotraficante Sito Miñanco.
Además de las acciones simbólicas fuera del Parlamento, los diputados de las formaciones de izquierda llevaron su presión al interior del hemiciclo. Presentaron numerosas preguntas al ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, para obtener información sobre la situación de González. John Iñarritu, de EHBildu, cuestionó al Ministro: «¿Qué gestiones ha realizado el Ministerio respecto a la detención del periodista vasco Pablo González en Polonia?». También Mertxe Aizpurua, del mismo partido, interpeló al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en una sesión plenaria el 5 de abril. Sánchez defendió las acciones del Ministerio de Asuntos Exteriores y de los servicios consulares españoles.
Además, en un vídeo difundido en redes sociales, un grupo de figuras progresistas del mundo de la cultura como Willy Toledo, Pepe Viyuela, Carlos Bardem o Fonsi Loaiza solicitó la liberación del periodista.
Por si tenías alguna duda de la culpabilidad del espía de Putin Pablo González no tienes más que ver este desfile. pic.twitter.com/rVRS9HfEo8
— Pastrana (@JosPastr) August 2, 2024