Ha llegado el día clave en Cataluña tras de meses de tensión desde las elecciones catalanas del pasado mes de mayo. Este viernes, los 8.500 miembros de ERC decidirán sobre el acuerdo alcanzado con el PSC de Salvador Illa, determinando así el futuro de la gobernabilidad en Cataluña y los tiempos para la nueva legislatura. Carles Puigdemont ha afirmado que asistirá a la investidura, a pesar de la orden de detención vigente en su contra.
El voto electrónico comenzará a las 10 de la mañana, y se espera conocer los resultados poco después de las 19:00 horas. A las 19:30 horas, la dirección del partido dará una rueda de prensa en la sede de Calabria para comentar los resultados de la consulta. La pregunta que se plantea a los militantes es: «¿Estás de acuerdo en que Esquerra Republicana vote a favor de la investidura del candidato socialista a cambio de la soberanía fiscal, la promoción y protección de la lengua catalana, la Convención Nacional para la resolución del conflicto político y el resto de medidas acordadas?».
El resultado es incierto y los votantes se enfrentan a un clima de profunda división y deterioro tras la ruptura del tándem Marta Rovira-Oriol Junqueras, luego de la autocrítica tras las elecciones catalanas en las que los republicanos perdieron 13 escaños. El escándalo de los carteles de los hermanos Maragall ha añadido más desconfianza interna, además de varios frentes internos opuestos a la dirección del partido.
La dirección del partido validó el preacuerdo con el PSC, con líderes como Marta Rovira y el presidente en funciones Pere Aragonès defendiéndolo públicamente. Se esperaba que Junqueras respaldara el acuerdo para facilitar el ‘sí’ de las bases, pero el expresidente de ERC solo ha emitido un mensaje ambiguo, diciendo que entiende las «dudas» de la militancia sobre el compromiso de los socialistas.
Rovira ha enfatizado en asambleas territoriales la necesidad de aprobar este acuerdo, afirmando que la duda no debe obstaculizar la implementación de los acuerdos y que es esencial para hacer valer los 20 escaños. La secretaria general, recientemente regresada a Cataluña después de su exilio, ha hecho un último llamado a la militancia para que apoyen el preacuerdo.
La aversión al PSC entre las bases republicanas se suma a cuatro derrotas electorales consecutivas, lo que deja en duda si los militantes apoyarán el preacuerdo. Este incluye un nuevo modelo de financiación para Cataluña, la creación de un Departament de la Llengua, un Pacto Nacional por la Lengua y una Convención Nacional para resolver el conflicto político, entre otras cuestiones significativas.