La plataforma Salvemos la Cruz, que ya presentó más de 13.000 firmas contra la retirada en el registro municipal del Ayuntamiento, censura la «premeditación, alevosía y espíritu revanchista» del equipo municipal.
El Ayuntamiento de Vall de Uxó (Castellón) ha iniciado este martes la retirada de la Cruz de los Caídos en cumplimiento de la sectaria ley de Memoria Histórica aprobada por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y mantenida por el Ejecutivo de Mariano Rajoy.
La plataforma Salvemos la Cruz, que ya presentó más de 13.000 firmas contra la retirada en el registro municipal del Ayuntamiento, ha censurado la «premeditación, alevosía, espíritu revanchista y chulería» del equipo municipal contra la «voluntad de los vecinos» y ha llamado a mantener las concentraciones en la Plaza de la Paz que, de momento, han paralizado el derribo.
«Seguiremos al pie del cañón, aunque parte de la Cruz ya ha sido derribada», ha dicho Leopoldo Peñarroja, portavoz de la entidad a La Gaceta, antes de recordar que en 1979 ya se retiró la «simbología franquista» y un alcalde comunista acordó su conservación como monumento de reconciliación.
El PP, ganador de las elecciones municipales en 2015, ya presentó hace dos semanas una querella contra el equipo de gobierno integrado por el PSPV, Compromís e Izquierda Unida y cree que responde al «sectarismo» del equipo de Gobierno, que se mueve por la «venganza» y en estos tres años ha mantenido «la ciudad paralizada».
Ciudadanos, que tiene un edil, también se ha opuesto y ha declarado que se han gastado 35.000 euros «para contentar a unos pocos». Además, a través de las redes, la entidad Abogados Cristianos ha manifestado que siguen tratando de detener la retirada de la Cruz. «Esto no es por la Memoria Histórica, esto es cristianofobia. Respeta mi fe».
El tripartito está derribando la cruz de la Plaza de la Paz, con nocturnidad y alevosía. 13.000 firmas no han servido para nada. 35.000€ gastados para contentar a unos pocos. pic.twitter.com/zM2ZKjRLS2
— Cs La Vall d’Uixó (@CsLaVall) 5 de junio de 2018
El Consistorio, por su parte, ha justificado su decisión en que «está avalada por los informes de los funcionarios municipales» y por el Comité Técnico de Expertos para la valoración de la retirada de vestigios relativos a la Guerra Civil y la dictadura.