Más de 200 vecinos de El Escorial (Madrid) se han manifestado para reclamar seguridad en las calles y no más delincuencia tras el secuestro exprés a una trabajadora del estanco del centro comercial de Los Arroyos el pasado 19 de enero.
La mujer fue abordada por dos encapuchaos que la golpearon en el garaje de su vivienda mientras reclamaban el dinero de la caja y las claves del estanco. Los ladrones la quitaron el móvil y la obligaron a subir a su propio coche para llevarla a un descampado.
Durante el camino tiraron su teléfono móvil por la ventana, y allí la golpearon y la amenazaron con una pistola hasta conseguir las claves de las tarjetas. Los asaltantes huyeron posteriormente en un vehículo que les esperaba. Ella logró conducir malherida hasta el centro comercial, donde unas vecinas la atendieron y la llevaron al hospital.
Los manifestantes piden más seguridad, más presencia de la Policía y más iluminación las calles. «Aquí estamos abandonados», afirma una vecina. La víctima ahora se recupera de las heridas físicas, las psicológicas «llevarán tiempo», según el presidente de la asociación de comerciantes de Los Arroyos, Pedro Luis Marín.
El alcalde, Antonio Vicente Rubio (PP), que se reunirá próximamente con Delegación del Gobierno, ha admitido el problema de seguridad: «Sí que es cierto que tenemos que poder medidas».
