El presidente de la Generalidad Valenciana, Carlos Mazón, ha impulsado una modificación salarial en el contexto de las graves inundaciones causadas por la DANA del pasado 29 de octubre. En un decreto destinado a reorganizar al personal público para afrontar la emergencia, se incluyó una disposición adicional que suprime el límite salarial del 15% por encima del sueldo del jefe del Ejecutivo para consejeros y secretarios autonómicos. Este cambio, según fuentes del Gobierno autonómico, busca atraer perfiles con experiencia en situaciones de gran magnitud, como la que enfrenta actualmente la Comunidad Valenciana.
Desde el inicio de la legislatura, Mazón había priorizado la eliminación de este techo retributivo. Ya había introducido una excepción para que altos cargos provenientes de la administración pública, con salarios superiores a los 80.173 euros (más 11.224 euros de complemento de residencia), pudieran mantener parte de sus ingresos al integrarse en el Gobierno regional. Ahora, con esta disposición, consejeros y secretarios autonómicos podrán conservar su sueldo previo al ocupar el nuevo cargo, siempre que provengan de puestos públicos de alta responsabilidad. Sin embargo, esta excepción no se aplicará a directores generales ni subsecretarios.
Entre los principales beneficiarios de la medida destacan el nuevo vicepresidente para la Recuperación, Francisco Gan Pampols, y el secretario autonómico Venancio Aguado, ambos militares retirados que podrán recuperar las retribuciones correspondientes a su etapa activa en las Fuerzas Armadas. También podría incluirse al nuevo consejero de Emergencias, Juan Carlos Valderrama, aunque este aún no ha revelado su salario previo. Según el texto del decreto, al incorporarse, se tomarán en cuenta los sueldos que estos cargos habrían percibido de mantenerse en sus puestos originales antes de cesar o pasar a la reserva.
La decisión ha generado críticas desde la oposición. La secretaria general del PSPV-PSOE y ministra de Ciencia, Diana Morant, ha calificado la medida como «inmoral», argumentando que, en un momento de crisis, la prioridad debería ser la reconstrucción y el apoyo a los ciudadanos, no el incremento de sueldos de los altos cargos. «Exigimos al Partido Popular y a Feijoo que aparten a Mazón. Esto no puede continuar así», declaró Morant, cuestionando los valores del presidente valenciano.
Esta polémica sobre los topes salariales no es nueva. Durante el anterior gobierno del Botànic ya se debatió una actualización retributiva para altos cargos, aunque nunca se llegó a concretar una reforma normativa. En contraste, Mazón ha avanzado rápidamente en esta dirección, incluso haciendo una excepción completa en el caso del director de la Agencia Valenciana Antifraude, Eduardo Beut, quien proviene de la Agencia Tributaria con un salario cercano a los 100.000 euros anuales.
Actualmente, al menos diez altos cargos de la Generalidad superan los 80.173 euros anuales en retribución, según los datos disponibles en el portal de transparencia. Con la eliminación del límite salarial, es probable que algunos de ellos vean incrementados sus ingresos, lo que ha encendido aún más el debate político en la región.