Pamplona ha amanecido este martes llena de pintadas contra la petición de penas notificada por la Fiscalía para los ocho individuos que agredieron a dos guardias civiles y sus parejas.
El entorno abertzle ha llenado este martes por la noche Pamplona de pintadas en rechazo a la petición de la Fiscalía de la Audiencia Nacional de una pena de 50 años de prisión para siete de los detenidos por la agresión a dos guardias civiles y sus parejas del pasado octubre.
Los incidentes tienen lugar, además, a un día del comienzo de los Sanfermines, unas fiestas que suelen ser politizadas por el entorno abertzale, bien con el despliegue de la ikurriña en el balcón del Ayuntamiento o frente a él durante el lanzamiento del chupinazo.
El pasado noviembre Pamplona también se llenó de grafitis en contra del desalojo del ‘gaztetxe’ del Chalé de Caparroso, en las que también se pedía la expulsión de la Guardia Civil y mostraba apoyo a los detenidos por la agresión a dos agentes en Alsasua y sus parejas.
La Audiencia Nacional los considera autores de cuatro delitos de lesiones terroristas, y a uno de ellos, además, se le atribuye un delito de amenazas terroristas, por lo que se piden el para él 12 años y medio más de prisión.
EH Bildu también mostró este martes su «más absoluto rechazo» a la petición de la Fiscalía. La considera «un despropósito absoluto, una desproporción sin ningún sentido», que «no responde sino a un montaje policial, judicial y mediático con base en determinados intereses políticos».
«Estamos ante una situación muy grave e inaceptable, en la que varios jóvenes de Alsasua se enfrentan a 50 años de petición fiscal con base en supuestos delitos de ‘terrorismo’ por unos hechos que en ningún Estado que se autodenomine de derecho pasarían de considerarse un altercado», ha subrayado esta formación política.
Además, EH Bildu ha exigido la inmediata puesta en libertad de los tres individuos que continúan encarcelados y «el fin de la amenaza judicial para todas las personas encausadas».
Los guardias civiles, satisfechos con la petición de penas
Las asociaciones que representan profesionalmente a la Guardia Civil han considerado que es una noticia positiva y que abre una importante vía de defensa para futuros casos de agresiones a los agentes, estén de servicio o no.
Para José Antonio Méndez, presidente de la Asociación Independiente de la Guardia Civil (ASIGC), la solicitud de la Fiscalía de la Audiencia Nacional es una buena noticia y considera que “si el fiscal la hace es porque está fundamentado y considera que no fue una mera pelea de bar”. Méndez también ha considerado que “la solicitud es acorde a la agresión que se produjo en Alsasua”.
Para el responsable de ASIGC esta misma contundencia debería tenerse con las agresiones que están sufriendo en otras partes de España los agentes de la Guardia Civil y ha señalado que se deben atajar los ataques cometidos por las redes de delincuencia organizada, especialmente la dedicada al narcotráfico. Y ha explicado que “no se puede consentir la situación de acoso que se está viviendo en Algeciras y La Línea”, en referencia a las recientes agresiones de miembros de mafias de la droga a varios agentes de la Guardia Civil.
Navarra también ha esperado que “esta línea de trabajo legal iniciado por la Fiscalía sirva de ejemplo y evite futuras agresiones a los agentes de la Guardia Civil”.
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