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Este artículo se publicó en La Gaceta antes de convertirse en La Gaceta de la Iberosfera, no siendo entonces propiedad de Fundación Disenso.

El Parlamento navarro sustituye el Día de la Hispanidad por el Día de la Resistencia Indígena

La presidenta de Navarra, Uxue Barkos, que no apoya el Día de la Hispanidad

Es previsible que, durante los actos de celebración de la nueva festividad, el nombre de España no quede en buen lugar, así como que se desprecien los logros conseguidos por los españoles en América


En un momento en que las estatuas de Cristóbal Colón son retiradas de ciudades de ambos hemisferios y en que parte de los españoles piden perdón casi a diario por la conquista y colonización de América, la Mesa del Parlamento de Navarra ha decidido sustituir el Día de la Hispanidad por el Día de la Resistencia Indígena. Éste, que es un inequívoca muestra de sumisión a la corrección política, se celebrará el próximo 11 de octubre; día en el que se leerá un manifiesto en defensa de los pueblos indígenas y actuarán grupos musicales hispanoamericanos.
Es previsible que, durante los actos, el nombre de España no quede en buen lugar, así como que se desprecien los logros conseguidos por los españoles en América. Se eludirá mencionar, de este modo, las avanzadas leyes aprobadas (Leyes de Burgos y Leyes Nuevas de Indias), la constitución de universidades, la edificación de catedrales, el mestizaje, y la predicación de la fe católica.
Ya se ha mentado que, durante la celebración del Día de la Resistencia Indígena, serán diversos los grupos musicales que deleitarán al público con melodías autóctonas hispanoamericanas. Sin embargo, no sólo actuarán conjuntos del otro continente, sino que también participarán los llamados ‘txistularis’, quienes interpretarán un pieza con el ‘txistu’, un instrumento de viento propio del País Vasco y Navarra. Así, habrá venezolanos, peruanos, ecuatorianos… y vascos, que deben de ser otro paradigma de resistencia frente a la opresiva acción de España.
Esta afrenta a nuestro país es aún más sangrante si tenemos en consideración que el Gobierno de Navarra (compuesto por Geroa Bai, EH Bildu e Izquierda-Ezquerra) no acudirá a los actos previstos en Navarra para el Día de la Hispanidad, que tendrán lugar este jueves, 12 de octubre. Tampoco se personará ningún representante del Ejecutivo foral en la celebración de Madrid: ya en 2016 y 2015 el propio Gobierno achacó su ausencia en los actos a razones ‘netamente políticas’.
Ya en su momento la delegada del Gobierno en Navarra, Carmen Alba, motejó de ‘penosa’ la ausencia de la presidente foral, Uxue Barkos, en las celebraciones institucionales por el Día de la Hispanidad en Pamplona.

Festivo, en cualquier caso

Este desprecio por el Día de la Hispanidad no impedirá, no obstante, que todos los partidos políticos del arco parlamentario navarro – también Uxue Barkos y sus socios – guarden fiesta (¡y puente!) hasta el próximo día 16 de octubre. Así, el 12 de octubre descansarán a pesar de escarnecer la realidad que éste representa.
El Día de la Resistencia Indígena es la denominación que recibe en Venezuela el Día de la Hispanidad desde el año 2002 – cuando Hugo Chávez tomó el poder – y conmemora la resistencia que ofrecieron algunos pueblos aborígenes frente al empuje español. En 2007 también fue bautizada con este nombre la festividad en Nicaragua, donde gobernaba el antes líder de la guerrilla sandinista Daniel Ortega.

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