Consideran que en la formación morada la prioridad es “asegurarse puestos retribuidos públicos y colocar en ellos a los afines”, en vez de “resolver los problemas de los sectores más vulnerables”.
Un grupo formado por purgados por la dirección de Podemos e incluso miembros de la formación se han aliado para desenmascarar al partido en el que un día depositaron su esperanza. Algunos están expedientados y expulsados, y otros son parlamentarios autonómicos y concejales también sin miedo a represalias. Y alzan la voz desde ocho comunidades: Cataluña, Madrid, País Vasco, Extremadura, Galicia,Castilla-La Mancha, Castilla y León, y Baleares, para destapar al partido y a su líder, Pablo Iglesias.
Estos activistas “decepcionados” critican “el abandono del espíritu del 15M, los objetivos fundacionales en materia social, de integridad pública y democracia”. En definitiva, denuncian las promesas electorales de la formación por las que fue respaldada y que han sido incumplidas. Podemos Unidos 15M se hacen llamar y este pasado viernes han dado su primera rueda de prensa. Fue en Madrid, en un local de Tirso de Molina.
Entre los que han alzado la voz está Enric Martínez Herrera, líder de Unidos Sí, que reclama la aplicación del artículo 155. Se postuló como candidato a la secretaría general autonómica de Podemos en Cataluña y fue el primer afiliado que denunció el abuso en los tribunales, logrando sentar en el banquillo a Carolina Bescansa, Íñigo Errejón y a Gloria Elizo.
También lo ha hecho Montserrat Seijas, diputada de Baleares especializada en Sanidad, purgada por la dirección; Fernando Barredo, miembro electo del consejo del partido en Castilla-La Mancha; Luisa Cayetano, actualmente inscrita en Podemos Galicia y Ana Bayón, expulsada de Podemos Extremadura junto a otras 11 personas por ejercer y presentar un manifiesto ante los medios de comunicación solicitando la dimisión del secretario de organización extremeño de Podemos.
Podemos Unidos 15M “defiende los derechos de los activistas y afiliados, imprescindibles para controlar los abusos de poder y la corrupción en Podemos, como es la necesidad de expresar las críticas constructivas y debatirlas”. No cree en “las purgas que está realizando la dirección mediante expedientes a través de la Comisión Disciplinaria, eufemísticamente llamada “de Garantías Democráticas”, amparándose en un artículo sumamente ambiguo (el número 65) de los Estatutos del partido, por el simple hecho de ejercer la libertad de expresión”.
Destaca que Podemos ha tenido la llave de la gobernabilidad en España, tanto en Diciembre de 2015 como en Junio de 2016, y que desde Mayo de 2015 ha sido partido clave para formar y mantener gobiernos en autonomías como Aragón, Asturias, Baleares, Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana, Extremadura y Navarra. Lamenta, sin embargo, que transcurridos más de dos años no han visto ni por asomo “el cambio que habían prometido a la gente de a pie, especialmente a la más afectada por la crisis” y que “la presencia de diputados podemitas en todos esos parlamentos no se nota”.
Esta agrupación destaca que la dirección de Podemos les “ha fallado en demasiadas cosas”. Por ejemplo, hace hincapié en que no se impulsan proyectos de Renta Básica Universal ni se ha puesto en marcha un plan de emergencia social, y se pregunta dónde ha ido a parar el “rescate ciudadano”.
Además, advierte de que la dirección desatiende los derechos laborales y que la mejora de la economía sigue sin llegar a los trabajadores. Indica que ciudadanos con 45 ó 50 años se ven rechazados por los mercados laborales, pero “su reincorporación al mercado laboral no es una prioridad para Podemos”.
En Sanidad, recuerda que las listas de espera son interminables, lo que empeora la morbilidad y causa muertes prematuras respecto a años atrás, y critica que nuestra Sanidad, ejemplo para muchos países de todo el mundo, “está siendo privatizada y evitarlo tampoco está en las prioridades de Podemos”.
También subraya que un porcentaje alto de la población con enfermedades crónicas y que no superan 700 euros de salario, se ven obligados a elegir entre comer o tomar su medicación, y que “el rescate farmacológico y su fomento donde gobiernan tampoco es una prioridad” para la formación que lidera Iglesias.
Otra de sus quejas es que “no se están impulsando planes relevantes de vivienda social ni se han puesto en marcha planes de mejora de las oportunidades educativas”, y que “la auditoría de la deuda pública de las autonomías, que identificaría enormes abusos de lo público por intereses ilegítimos, así como casos de malversación masiva de fondos públicos, no se está realizando en ninguna comunidad”.
En este sentido, apunta que la lucha de Podemos contra la corrupción “se limita a señalar la paja en el ojo ajeno de otros partidos sin ver la viga en el propio”. Recuerda que en tres años sólo ha dimitido un dirigente de Podemos, en 2015, pero que “los casos de Errejón, Espinar y Echenique no han dado lugar a ninguna dimisión ni expediente”.
Podemos Unidos 15M manifiesta que en la formación morada “se están dejando arrastrar por el poder y les están absorbiendo las alfombras de las instituciones”.
También afirma que las políticas de Podemos en las diferentes autonomías “van dirigidas a su interés en consolidarse como fuerza política convencional, no a resolver los problemas de los sectores más vulnerables de nuestra sociedad”, y que “parece que al final la prioridad está siendo asegurarse puestos retribuidos públicos y colocar en ellos a los afines”.
Asimismo, explican que son testigos de cómo muchos de sus compañeros en las instituciones “han sido absorbidos por las dinámicas habituales de los partidos que llaman “casta”, presenciando intervenciones en los distintos parlamentos que no distinguen al pretendido “partido de la gente” de cualquier otro convencional”.
En conclusión, Podemos Unidos 15M defiende los objetivos fundacionales de la formación y quiere recuperar el Podemos que votaron, “que trate de solucionar los problemas de la población, como las condiciones laborales o los recortes sanitarios y sociales”.
Esta plataforma destaca que cuando entraron a Podemos eran conscientes de que no sería un camino fácil y sin obstáculos, pero para lo que no estaban preparados era para que «las trabas para recuperar las libertades perdidas fuesen puestas por los que estaban llamados a liderar el famoso ‘empoderamiento ciudadano’”. Su principal objetivo como colectivo es “recuperar el proyecto inicial de Podemos, antes de que se dieran a la buena vida en las instituciones”.
Alguna publicidad valiente y la ayuda desinteresada de muchos lectores como tú han hecho posible esta noticia. Conoces nuestra línea editorial, a contracorriente de la ideología dominante y desacomplejadamente comprometida con la dignidad humana, la unidad de España y la identidad de Europa. No es fácil ni es barato sostener un medio de comunicación que beba de estos postulados, siempre contra los más poderosos. Por eso te pedimos que nos ayudes con una aportación, que formes parte de nuestro proyecto, que ayudes a que sigamos incordiando al Poder. Puedes hacerlo de varias maneras, infórmate aquí.
Leer más…
‘El nuevo pluralismo de Podemos, una astracanada’
La sociedad catalana exige a Rajoy la inmediata intervención y el 155