Durante el primer trimestre de 2024, España registró más de 15,000 robos con violencia, destacando un incremento preocupante en varias provincias. Barcelona se sitúa en el primer puesto con más de 900 robos por millón de habitantes, seguida por Madrid con 419, Girona con 361 y Valencia con 347.
Según un análisis realizado por Datadicto, la variabilidad en la incidencia de robos violentos es notable a lo largo del país, reflejando desafíos específicos en términos de seguridad en distintas regiones. Si analizamos la posible relación entre este tipo de delito y la inmigración ilegal, comprobamos que Barcelona, líder en hurtos, es la provincia con mayor porcentaje de magrebíes de todo el país (137.010).
Madrid, que cuenta con una gran masa de inmigrantes provenientes de diversas naciones (955.122, pero 77.369 marroquíes), es la segunda en la lista. Al contrario, podemos comprobar que comunidades autónomas como La Rioja, Extremadura o Cantabria —con menor saldo migratorio— se encuentran en la cola entre las regiones que más hurtos han sufrido. Prueba de ello es que en Cáceres tan sólo se han producido 33.
Y es que la inseguridad se ha convertido en una de las principales preocupaciones de los ciudadanos. Si nos fijamos en las cárceles a nivel nacional, comprobamos que en España ya hay más jóvenes extranjeros que nacionales entre los reclusos menores de 22 años. Actualmente, hay 1.513 delincuentes juveniles en las prisiones españolas, de los cuales 645 nacieron en el país y 868 (el 57,37%) provienen de otras naciones.
Este documento proporciona una distribución detallada de los presos según su nacionalidad, género y comunidades autónomas. Andalucía es la región con el mayor número de reclusos menores de 22 años, con un total de 366. De estos, 196 son extranjeros y 170 españoles, lo que significa que el 53,55% son foráneos. La Comunidad de Madrid y la Comunidad Valenciana le siguen de cerca, con 258 y 200 presos jóvenes respectivamente, donde la proporción de extranjeros alcanza el 62,02% y el 62,50%.