El antisistema admitió sin reparos en el documental Ciutat Morta que iba a hacer algo «para volver a sentirse bien».
Poco a poco se van conociendo más detalles acerca de Rodrigo Lanza, el antisistema detenido por el asesinato de Víctor Laínez en Zaragoza. El exlegionario fue atacado por dos personas que le golpearon supuestamente con una barra de hierro y después, una vez caído, le patearon en el suelo.
Lanza es un viejo conocido de las autoridades policiales. El hombre de 33 años fue condenado a cinco años de cárcel por arrojar una piedra a un agente durante un desalojo okupa en Barcelona en 2006.
Los sucesos por los que fue condenado tuvieron lugar durante una pelea tras una fiesta okupa. Entonces, el detenido ahora en Zaragoza, Rodrigo Lanza, de nacionalidad chilena, arrojó una piedra que dejó al agente en estado vegetativo.
Mariana Huidobro, madre del violento antisistema de origen chileno, grabó un documental sobre los disturbios en Barcelona en 2006. Huidobro y Lanza trataron de defender la inocencia de este último a través del corto asegurando que se trataba de un montaje policial y judicial. También acusaron a los agentes de haber torturado a los presos.
‘Quiero venganza’
En el citado documental, que fue emitido por TV3, Lanza no tiene reparos en admitir sus deseos de venganza y su odio hacia las fuerzas del orden. «Yo busco venganza, yo lo tengo claro. La justicia ha perdido sentido y yo me voy a vengar de todo esto. Voy a hacer algo para volver a sentirme bien y lograr algo de equilibrio».
Gonzalo Boye, abogado defensor, también aparece en la grabación. El editor de la revista Mongolia, condenado por colaborar con ETA en el asesinato de Emiliano Revilla, asegura que todo lo ocurrido es «un burdo montaje policial».
El letrado convirtió la defensa de Lanza en intento por demostrar una supuesta trama corrupta para encarcelar a los delincuentes detenidos. De hecho, Boye aseguró en aquel momento que “la ciencia dijo que no fue una piedra lo que causó las graves heridas al policía sino algo arrojado desde un tejado”.
Gonzalo Boye, condenado por colaborar con ETA, fue abogado del antisistema