La presidenta de la Asociación Nacional para la Defensa del Derecho a la Objeción de Conciencia (ANDOC), Eva María Martín García, ha comentado que el plan provida de Castilla y León puede «salvar vidas» y ha asegurado que sólo establece ofrecer información a las mujeres, pero «no» forzarlas a realizarse una prueba.
Martín García se ha pronunciado así después de que la Junta de Castilla y León haya anunciado que implantará medidas provida y de fomento de la natalidad en la comunidad como, por ejemplo, un refuerzo de la atención psicológica a las madres embarazadas, un protocolo que permita a los padres la escucha del latido fetal, ofrecer una ecografía 4D que complemente las tres convencionales contempladas actualmente y proteger la objeción de conciencia de los profesionales sanitarios.
Una medida por la que el Gobierno presidido por Pedro Sánchez ha presentado un requerimiento a la Consejería de Sanidad de Castilla y León para que se abstenga de aprobar o aplicar alguna medida que vulnere la actual normativa con respecto a los abortos.
«Es una polémica artificial política y una medida de presión al Gobierno hacia Castilla y León para meter miedo. Esta medida puede ayudar a salvas vidas. Se trata de ofrecer información, no de forzar, y esto sí está dentro de la legalidad», ha zanjado la presidenta de ANDOC.