Un pueblo navarro, Etxarri Aranatz, se ha situado en el centro de la polémica porque una asociación de jóvenes de la localidad ha decidido celebrar el ‘día del inútil’ con un cartel en el que se puede observar a dos guardias ciciles entre llamas.
La asociación profesional Justicia para la Guardia Civil (JUCIL) ha anunciado que solicitará, a través de sus servicios jurídicos, acciones legales contra los organizadores del día del inútil que se celebra en la localidad navarra de Etxarri Aranatz «por la comisión de un posible delito dirigido especialmente contra las personas que forman parte del colectivo de la Guardia Civil y sus familias».
En un comunicado, la asociación ha señalado que «como en circunstancias anteriores», pondrá a sus servicios jurídicos en marcha «para solicitar de la Administración de Justicia la toma de acciones legales frente a los que violentan la democracia, imponen el odio a una parte de la sociedad española y no dudan en tomar iniciativas delictivas como la que se lleva a cabo en Etxarri Aranatz».
«Esta es una asociación que defiende los intereses legales, laborales y sociales de los guardias civiles. Y en este momento hay guardias civiles y sus familias en una parte de España que se encuentran directamente amenazados, y no es por la delincuencia común, sino que es desde instituciones públicas, desde una administración municipal, desde la que se alientan conductas de odio hacia ellos y hacia sus familias«, ha afirmado el secretario general de Comunicación de JUCIL, Agustín Leal.
Tras reclamar del Gobierno de España «una actitud honesta y honrada en la que defiendan a las personas que forman parte de la Guardia Civil», desde la asociación han criticado que este acto consiste «en quemar figuras humanas de guardias civiles en un claro ejemplo de aliento al odio hacia las personas por parte de dirigentes políticos».
«Esperamos del Gobierno de España que reclame a la Fiscalía para que actúe frente a estos hechos, un auténtico, claro y evidente delito de ocio alentado desde las instituciones públicas de esta localidad navarra», ha añadido Leal.
JUCIL considera que la Fiscalía «tiene razones más que suficientes para proceder frente a los convocantes de estos actos, en los que se denigra directamente a las personas, además de tratarse de un evidente ataque a una institución, como la que forma la Guardia Civil, que es un cuerpo policial que defiende la democracia en España y el Estado de Derecho».
«Nos encontramos ante un claro caso de ataque directo a la democracia y a las instituciones que la defienden y no entendemos que desde el Gobierno de España, con la obligación de proteger a todos, a todos los españoles, se mire para otro lado y prefieran que en Navarra campe la humillación, la burla, el odio hacia unos ciudadanos, a cambio de unos sillones», ha apuntado Leal.