El trasvase Tajo-Segura, una de las infraestructuras hidráulicas más importantes de España, y esencial para la economía del levante y de todo el sureste de la Península, tiene fugas. Muchas fugas. Así lo atestiguan numerosos vídeos, que ponen en evidencia el dudoso funcionamiento de las gigantescas tuberías de más de 290 kilómetros de longitud.
En una de las localidades por las que pasa el trasvase, sin embargo, han decidido aprovechar estas carencias de la infraestructura estatal para lavar los coches. Así ha sido publicado por decenas de usuarios de redes sociales. Vecinos de Orihuela (Alicante) han colocado sus coches debajo de las fugas de agua y de esta forma lavarlos gratuitamente: «¡No hay mal que por bien no venga!», señalaba con ironía un usuario.
La anécdota, sin embargo, esconde una gran negligencia por parte de las autoridades. Según han indicado, en ese tramo hay nueve fugas, de las cuales cinco son pequeñas y cuatro son grandes. Otro de los vecinos ha criticado la falta de mantenimiento: «El trasvase del Tajo-Segura pierde 90 hm³ al año, que supone el 15% de lo que se trasvasa (600 hm³)». Precisamente por eso usuarios han denunciado que «esta cantidad es cuatro veces la capacidad del embalse que abastece a Bilbao. El problema no es la sequía sino la gestión del agua, que en España da para una tesis doctoral».