VOX ha rendido este miércoles tributo a los mártires de Nembra, un pueblo del municipio asturiano de Aller. Fueron cuatro asturianos asesinados en 1936 simplemente por ser católicos. Eran personas sencillas: un estudiante de magisterio, dos mineros y un párroco, que se vieron envueltos en la espiral de violencia desatada durante el Terror Rojo.
Este tributo, consistente en una ofrenda floral a la que acudieron los diputados asturianos de la Junta General del Principado, Javier Jové y Gonzalo Centeno, llega después de la negativa expresada en una comisión parlamentaria por el consejero comunista de Ordenación del territorio, Vivienda y Derechos Ciudadanos, Ovidio Zapico, a rendir tributo a dichos mártires.
Ante esta situación, Javier Jové ha comentado que estas víctimas de Nembra son «despreciadas por las instituciones asturianas y por el camarada Zapico, que renuncia a ser el consejero de todos los asturianos, no sólo de los vivos, sino también de los muertos». «Así, mientras financia con dinero público, organiza y asiste a ceremonias sólo de unas víctimas, retira placas, monolitos y derriba cruces para ocultar los más de 2.000 asesinatos cometidos por aquellos de quienes él se siente heredero político, rehúye cualquier tipo de compromiso con la concordia y la reconciliación”.
El diputado ha destacado también unas palabras que el minero Isidro Fernández le dijo a su hija momentos antes de ser asesinado: «Tenéis que perdonar a todos como yo les perdono». «Esa extraordinaria actitud es la que adoptaron nuestros mayores, quienes supieron pasar página y construir juntos una Transición que superara las diferencias y permitiera la convivencia, lejos del guerracivilismo que hoy agitan las izquierdas para dividir y enfrentar nuevamente a los españoles», ha añadido. «Exigimos al Principado de Asturias máxima neutralidad ideológica, respeto por la verdad y por la historia, por dolorosa que sea», ha concluido Javier Jové.