El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha transmitido cariño y apoyo a su hijo, Hunter Biden, en el marco del primer día de su juicio por posesión ilegal de armas, que ha arrancado este lunes con la elección de los 12 miembros del jurado.
«Como padre, siento un amor desmesurado por mi hijo, tengo confianza en él y siento respeto por su fortaleza. Hemos pasado por muchas cosas juntos como familia y Jill y yo continuaremos estando ahí para Hunter y para nuestra familia», ha indicado en un comunicado.
Biden ha puesto en valor «la resiliencia de Hunter frente a la adversidad»: «Muchas familias tienen a seres queridos que han superado una adicción y saben lo que queremos decir con esto», ha agregado.
La portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, afirmó el año pasado en una rueda de prensa que Biden no concedería el perdón presidencial a su hijo en el caso de que fuese condenado.
Biden está imputado por tres cargos al haber estado en posesión de un arma, concretamente un revólver Colt Cobra, durante al menos 11 días después de haber falsificado en 2018 el formulario para su compra y de haber mentido al vendedor.
El primero de estos cargos acusa a Hunter Biden de mentir en un formulario de la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos de Estados Unidos (ATF) al jurar falsamente que no era adicto ni consumía drogas ilegales.
El segundo de ellos señala que el hijo del mandatario habría mentido al vendedor del arma sobre el mismo asunto. El tercer cargo acusa a Hunter Biden de posesión ilegal de armas mientras consumía o era adicto a drogas, lo cual es considerado como un delito federal.
El hijo de Biden también se enfrenta a nueve cargos —de los que se declaró no culpable en enero— por evasión de impuestos en el estado de California. Según la acusación, el hijo de Biden gastó 1,4 millones de dólares en impuestos federales en drogas, acompañantes, hoteles de lujo, vehículos de lujo o ropa, entre otros.