El gobernador de Florida, Ron Desantis, puso a disposición del estado de Texas a 800 reservistas de la Guardia Nacional, con miras a reforzar la seguridad en la frontera sur de los Estados Unidos. Todo ello en momentos en los que ha comenzado a operar la nueva normativa migratoria del país, tras la derogación del Título 42, heredado de la Administración del expresidente Donald Trump.

«Florida está lista para ayudar a Texas a responder a esta crisis», dijo DeSantis el martes. El político republicano afirmó además que los integrantes de la Guardia Nacional pueden » ayudar a defender la frontera sur».

Además, el gobernador de Florida ha puesto a disposición de Texas 400 agentes de las fuerzas del orden locales, 17 drones y 10 embarcaciones.

La Gobernación de Florida basa su declaración en Pacto de Asistencia para el Manejo de Emergencias (EMAC), que contempla que cualquier estado puede proporcionar ayuda a otra localidad del país en tiempos de emergencia.