El Departamento de Estado de los Estados Unidos ha movilizado a aproximadamente 1.500 efectivos militares a la frontera sur del país, con miras a reforzar las medidas de protección de su territorio ante la inmigración ilegal que llega proveniente de México.
La medida, que cumple rápidamente una de las promesas clave de campaña de Trump, se hace oficial a través de la firma de órdenes de despliegue militar del secretario de Defensa de EEUU, Robert Salesses, que debían estar listas para el final del miércoles.
Este punto fronterizo ya cuenta con aproximadamente 2.500 integrantes de la Guardia Nacional, que serían reforzados por este nuevo contingente militar.
Por otra parte, el llamado «zar fronterizo» de la Administración Trump, Tom Homan, ha informado de que el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) ya ha ejecutado 388 detenciones de inmigrantes ilegales en el país. Se estima que hay unos 700.000 ilegales con cargos penales en todo Estados Unidos.