El estado de Kansas (Estados Unidos) hizo oficial una demanda a la farmaceútica Pfizer, tras considerar que incurrió en un engaño al momento de publicitar su vacuna contra la Covid-19.
Información divulgada el 1 de abril de 2021 señala que en el caso de su vacuna «no había problemas graves de seguridad hasta seis meses después de la segunda dosis». Sin embargo, la base de datos de la propia empresa deja entrever que para febrero de 2021 Pfizer tenía conocimiento de al menos 158.893 eventos adversos con la vacuna, que fue fabricada junto a la alemana BioNTech.
«Las declaraciones de Pfizer de que su vacuna Covid-19 no tenía ningún problema de seguridad eran inconsistentes con los datos de eventos adversos que poseía», dijo el fiscal de Kansas, Kris Kobach.
Además, Pfizer también señaló que quienes tomaban la vacuna disfrutaban de una protección de hasta el 91,3% de efectividad seis meses después de la segunda dosis, cuando en realidad la documentación interna de la empresa demuestra que el presunto grado de efectividad de la misma era realmente de 83,7%.
«La ocultación, supresión y omisión por parte de Pfizer de la eficacia decreciente de su vacuna COVID-19 permitió a Pfizer beneficiarse de las vacunaciones de los habitantes de Kansas que podrían haber sido disuadidos de la vacuna COVID-19 de Pfizer si hubieran sabido de su eficacia decreciente», indica la demanda, reseñada por el medio The Epoch Times.