El secretario de Estado norteamericano, Marco Rubio, ha anunciado este lunes desde El Salvador que es el administrador en funciones de la Agencia para el Desarrollo Internacional de Estados Unidos (USAID).
Rubio ha afirmado que «el funcionamiento de la USAID» debe alinearse con la política exterior del país, a lo que esta «se niega». Ahora mismo «es una agencia completamente indolente» cuya dirección ha tenido que asumir el Departamento de Estado. Rubio ha explicado que ha delegado su gestión a alguien con el que está en contacto, según recoge la cadena CNN.
El secretario de Estado ha reconocido que «hay cosas que hace USAID, que hacemos a través de la USAID, que deberíamos de seguir haciendo y que vamos a seguir haciendo». «Pero todo lo que hagan tiene que estar alineado con el interés nacional y la política exterior de Estados Unidos», ha insistido.
«No se trata de acabar con los programas de la USAID ‘per se’. Hay cosas que hace que son buenas y hay cosas que hace sobre las que tenemos preguntas importantes», ha añadido.
Este lunes la sede de USAID en Washington permanecía cerrada, un paso más después de que Trump firmara una orden ejecutiva que paraliza toda la ayuda internacional durante 90 días al poco de llegar a la Casa Blanca.
Además, la agencia ha protagonizado un enfrentamiento abierto con la Agencia de Eficiencia Pública (DOGE) que dirige Elon Musk, uno de los principales aliados de Trump.