El Servicio de Seguridad Policial de Noruega, el PST, ha declarado este sábado la máxima alerta terrorista tras el ataque en las inmediaciones de un club gay esta madrugada en la capital del país, Oslo, que se ha saldado con dos muertos y 21 heridos.
El ataque está siendo investigado como un atentado terrorista y tuvo lugar en el bar de copas gay llamado London Pub, un restaurante de comida rápida y el club de jazz Herr Nilsen, todos situados en la calle Rosenkrantz, en el centro de la capital noruega.
A raíz del suceso, el PST ha decidido activar la alerta cinco, el nivel «excepcionalmente alto» de amenaza terrorista, según ha hecho saber el responsable de la organización, Roger Berg, en declaraciones recogidas por la cadena pública NRK. «Ha habido un ataque terrorista, y hay una situación terrorista sin resolver. Por lo tanto, el nivel ha sido elevado», ha indicado.
Poco después del incidente, la Policía detuvo a un individuo de 42 años, de origen iraní y conocido por las autoridades, que ya ha sido acusado de asesinato, intento de asesinato y ataque terrorista.
El atacante estaba fichado por la Policía por radicalismo islamista y llegó con su familia a Noruega como refugiado. Previamente había sido condenado por delitos menores, entre ellos 120 días de cárcel por drogas, en 2016. Tres años después, fue arrestado por intento de asesinato, posesión ilegal de un arma de fuego y posesión ilegal de un cuchillo en un lugar público, pero nunca fue condenado por ello.
