La Unión Europea ha aprobado este viernes la renovación de las sanciones individuales por la guerra entre Rusia y Ucrania tras superar las reticencias de Hungría, que también secundaba Eslovaquia, para sacar de la lista negra a algunas personas o empresas rusas.
Según fuentes europeas, se ha decido prorrogar por seis meses las sanciones que afectan a más de 2.400 personas y entidades rusas. En este sentido, se ha llegado a este pacto tras negociar retirar las restricciones a tres personas que figuraban en la lista negra de la UE pese a haber fallecido.
La renovación de las sanciones ha sido aprobada por unanimidad después de que Hungría decidiera levantar su veto y permitir la renovación. Sin embargo, Budapest exigió la eliminación de varios nombres de la lista negra y, tras intensos debates entre bastidores, finalmente se alcanzó un compromiso para publicar menos nombres de los que quería Hungría.