El copresidente de la ECR, el profesor Ryszard Legutko, recibió este miércoles el prestigioso premio János Hunyadi, que fue presentado por el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, y rinde homenaje a sus muchos años de lucha en la preservación de los fundamentos culturales y los principios morales de Europa.
Este premio internacional fue creado para honrar la lucha en la defensa de la libertad y la independencia de las naciones europeas, y la defensa firme de una cultura cristiana universal que une a las naciones del continente.
En una ceremonia organizada por la fundación del partido Fidesz, Viktor Orbán fue el encargado de entregar el galardón y en su discurso denunció que los liberales progresistas son «hostiles» con toda disidencia y alertó de la vuelta de los comunistas, que representan una amenaza real para la libertad «porque están tratando de hacer realidad sus propios sueños utópicos».
«Cuando nos unimos a la UE en 2004 tuvimos la sensación de que habíamos llegado y regresado a casa», afirmó Viktor Orbán. «Pensamos que la UE sería un refugio de prosperidad y una garantía de nuestra independencia nacional», añadió, al tiempo que insistió en denunciar los representantes del liberalismo (progresismo) se esfuerzan por abolir la soberanía y reducir al máximo los poderes nacionales. «Aquellos con quienes discutimos en realidad están tratando de liquidarnos», subrayó, antes de agregar que en esta batalla no vencerán el imperio de George Soros y los burócratas de Bruselas, sino las naciones.
E insistió en que ahora Europa «da señales de vida, se defiende y hace oír su voz»: «Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que vi una oportunidad tan buena para que las fuerzas nacionales, conservadoras, soberanistas y cristianas pudieran volver a ser dominantes en la Unión Europea», dijo.
El eurodiputado de VOX Hermann Tetsch afirmó que la entrega del premio Janos Hunyadi por la entidad Protección de Valores Europeos y la Libertad al profesor polaco fue una «inolvidable ceremonia» en Bruselas «con discursos demoledores sobre la perversión del proceso totalitario de la deriva socialdemócrata de la UE». «Memorables palabras de niveles ya difíciles de encontrar en el pedestre discurso político general».
