El Gobierno de Alemania ha dado «luz verde» este miércoles a un proyecto de ley para legalizar la venta y uso recreativo de cannabis, si bien ha fijado el límite de posesión legal en los 25 gramos por persona adulta.
La legislación aprobada por el canciller alemán Olaf Scholz permitirá cultivar un máximo de tres plantas para uso personal. Asimismo, el cannabis recreativo tendrá que dispensarse en clubes sociales y se prohibirá su consumo en locales de ocio nocturno, así como en un radio de 250 metros.
Según el ministro de Sanidad, Karl Lauterbach, la ley es un «punto de partida» para solventar una «ley fallida de cannabis». Su objetivo, por tanto, es disminuir los delitos relacionados con las drogas, frenar el tráfico de sustancias tóxicas y reducir el número de consumidores.
«La protección de los menores y de la gente joven es un aspecto central del proyecto legislativo», ha subrayado Lauterbach, agregando que la legislación —que tendrá que ser aprobada por las dos cámaras del Parlamento— impulsará la «seguridad sanitaria».
Los planes de la coalición de Scholz, formada por el Partido Socialdemócrata (SPD), Los Verdes y el Partido Liberal (FDP), han recibido fuertes críticas, especialmente por parte de la oposición y también por la Asociación Alemana de Jueces, que teme una mayor presión sobre el poder judicial.