El ministro de Asuntos Exteriores, Péter Szijjártó, comentó esta semana con su homólogo israelí, Gideon Sa’ar, la situación en Siria tras la caída de Bashar al Assad. «Tanto Hungría como Israel estamos interesados en la paz, la tranquilidad y la estabilidad de toda la región del Oriente Medio», manifestó en Facebook.
«Nos preocupa que una ideología extremista o grupo extremo puedan controlar la región (…). Estamos de acuerdo en que debe prestarse especial atención al respeto de los derechos de las comunidades religiosas y de las minorías, y a la seguridad de estas comunidades», añadió.
«Nosotros vigilamos el destino de las comunidades cristianas con especial sensibilidad, les brindamos constantemente asistencia humanitaria y, al mismo tiempo, esperamos que la comunidad internacional logre el respeto de los derechos de las minorías religiosas», señaló.
Por otra parte, el ministro del Interior, Sándor Pintér, ha destacado la importancia de la protección de las fronteras exteriores de la Unión Europea tras la reunión del Consejo de Justicia y Asuntos de Interior (JAI) en Bruselas.
Pintér ha considerado de importancia «histórica» que Rumanía y Bulgaria sean miembros plenos de Schengen a partir del 1 de enero y señaló que el Consejo se comprometió a reforzar las fronteras de Grecia con Turquía y Bulgaria, así como el tramo entre Bulgaria y Turquía. Hungría mantendrá hasta el 30 de junio un «control fronterizo secundario» en su frontera con Rumanía.