El primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico, ha solicitado la suspensión inmediata de las compras de vacunas contra la Covid-19 tras la publicación de un informe que señala la presencia de ADN y otras sustancias no declaradas en las dosis administradas en el país. La solicitud se fundamenta en un estudio realizado por una comisión dirigida por Peter Kotlar, médico ortopédico y miembro del Partido Nacional Eslovaco, quien sostiene que las vacunas de ARNm podrían modificar el ADN humano y no han sido suficientemente evaluadas.
En un video difundido en la red social X, Fico ha advertido que sería «extremadamente irresponsable» ignorar las conclusiones de la comisión liderada por Kotlar. Anteriormente, el primer ministro ya avisó que había ordenado al Ministerio de Salud la creación de un grupo de trabajo para abordar las preocupaciones expuestas en el informe, aunque reconoció que los resultados podrían no estar disponibles a corto plazo.
Además, Fico ha propuesto que la Academia Eslovaca de Ciencias (SAV) realice un análisis independiente sobre la presencia de ADN y otras sustancias en las vacunas. También ha insistido al Gobierno a informar a la ciudadanía sobre los «graves hallazgos», subrayando que, aunque las tasas de vacunación en el país son muy bajas, la población merece conocer los riesgos.
El primer ministro ha planteado la suspensión de nuevas compras de vacunas a un fabricante no identificado, pese a que Eslovaquia está comprometida a adquirir cerca de 300.000 dosis en 2025 y 2026, en virtud de un contrato firmado en 2023, por un valor aproximado de 6,6 millones de dólares. Fico ha insistido así en que no deberían realizarse nuevas adquisiciones ni pagos hasta que se conozcan los resultados del análisis adicional.
