La Fiscalía de Francia ha pedido este miércoles que el expresidente Nicolas Sarkozy sea declarado culpable por, supuestamente, haber financiado su campaña electoral de 2007 con dinero proveniente del dictador libio Muamar Gadafi.
Aunque la institución reconoce que «no hay proporción entre las sumas pagadas en el pacto de corrupción» (estimado en unos 6 millones de euros) «y el dinero en efectivo encontrado en la campaña» (que asciende a decenas de miles de euros), ha dicho que «hay un rastro de este dinero en efectivo. Mínimo, pero hay rastro».
Por tanto, la Fiscalía ha determinado que el exmandatario debe ser condenado por encubrimiento de malversación de fondos públicos, corrupción pasiva y asociación para delinquir.
Se espera que este jueves sea conocida la condena impuesta a Sarkozy.
