El primer ministro de Hungría, el nacionalista Viktor Orbán, aseguró hoy que en la Unión Europea (UE) se encuentra dividida de forma irremediable entre los países que aceptan inmigrantes y aquellos de Europa Central que están «libres» de ellos.
«Hoy queda claro que en el continente los países se dividen en dos grupos: hay una franja libre de inmigrantes, que es Europa Central, y están los países de inmigración», declaró Orbán a la radio pública Kossuth.
Orbán opinó que esas diferencias son inconciliables, por lo que «más bien habría que trabajar en que, reconociendo las diferencias, funcione lo mejor posible la convivencia».
Según el primer ministro húngaro, en el Parlamento Europeo «ya se desarrollan negociaciones para presionar a Hungría y a los otros países de Europa Central» que se niegan a aceptar refugiados.
Orbán aludió así a una propuesta de la Comisión de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos de Interior del Parlamento Europeo sobre la reforma del reglamento de Dublín que, según Orbán, prevé imponer cuotas obligatorias de recepción de refugiados.
Orbán se opone categóricamente al sistema de reparto solidario de refugiados en todos los países de la UE elaborado por Bruselas, un rechazo por el que la Comisión Europea ha abierto un procedimiento de infracción a Hungría.
El mandatario recalcó hoy que tras esta iniciativa está el magnate estadounidense george Soros, al que el Gobierno de Orbán ve como su enemigo político número uno.
Según el primer ministro, los servicios de seguridad nacional deberían investigar esta supuesta «red de Soros».
Los miembros del Gobierno de Orbán hacen declaraciones a diario sobre Soros, que se ha convertido en uno de los temas centrales de la estrategia ante las elecciones generales que se celebrarán, previsiblemente, dentro de seis meses.