El Gobierno de Países Bajos está considerando la posibilidad de enviar a los inmigrantes ilegales a un centro de deportación en Uganda en el caso de que su solicitud de asilo sea rechazada. La ministra de Comercio Exterior y Desarrollo, Reinette Klever, adelantó la información y aseguro que en última instancia depende de la ministra de Asilo, Marjolein Faber.
Además, desde el Ejecutivo avisan que sólo se aplicaría a los inmigrantes ilegales de países de la región alrededor de Uganda, o de la propia Uganda, y serían pagados por los Países Bajos por el servicio en el caso de que el plan siga adelante. No obstante, tendrán que negociar cuántos países entran realmente en la categoría de estar en la misma región.
Según el primer ministro holandés, Dick Schoof, la idea de un centro en Uganda es un ejemplo de una «solución innovadora en la que están interesados «. Asimismo, asegura que «son ideas que lleva a los solicitantes de asilo rechazados de vuelta a la región y luego se les deja regresar del centro de la región a su país de origen».