Al menos diez personas han muerto y otras once han resultado heridas tras desatarse en la madrugada de este viernes un incendio en una pensión situada en la ciudad de Porto Alegre, en el sur de Brasil.
El número de víctimas podría aumentar ya que todavía hay desaparecidos, ha informado el Cuerpo de Bomberos. El edificio albergaba a personas en situación de vulnerabilidad, a muchas de las cuales se les financiaba su estadía con dinero público, informa el portal brasileño de noticias G1.
Los Bomberos acudieron sobre las 2.00, hora local, si bien el fuego no ha sido contenido hasta tres horas después. El origen del incendio es desconocido, aunque las autoridades locales sospechan que podría haber sido intencionado.
Once personas han logrado ser rescatadas, ocho de las cuales han necesitado ser trasladadas al hospital. El estado de tres es grave, una de las cuales sufre quemaduras en el 20 por ciento de su cuerpo.
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, ha expresado su «tristeza» y «preocupación» por lo ocurrido, destacando que el local era un centro en el que se acogía a personas vulnerables. «Mi solidaridad con las familias y los amigos que han perdido a sus seres queridos», ha manifestado a través de su cuenta de X.
