La Policía Federal de Brasil ha acusado al expresidente Jair Bolsonaro y a otras 16 personas por su supuesta implicación con una trama de falsificación de los registros oficiales de vacunación frente a la COVID-19, uno de los múltiples frentes judiciales que tiene abierto a día de hoy el antiguo mandatario.
Los investigadores afirman que la red falsificó los registros de al menos siete personas, entre ellas el propio Bolsonaro, según las fuentes citadas por el portal G1, que dan cuenta de una batería de delitos que incluyen asociación criminal o inserción de datos falsos.
En el caso del presidente, presuntamente la modificación se realizó pocos días antes de que viajase en diciembre de 2022 a Estados Unidos, un país que exigía una prueba de vacunación dentro de sus medidas contra la pandemia. Bolsonaro siempre se había mostrado reacio en público a vacunarse.
Finalmente, 17 personas han sido señaladas por la Policía, en una decisión preliminar que ahora corresponde examinar a la Fiscalía, que es que el órgano competente para formalizar una denuncia ante el Tribunal Supremo o archivar la investigación. Entre los imputados figuran personas del entorno de Bolsonaro, entre ellas Mauro Cid, un antiguo asesor que ahora se ha ofrecido a colaborar con las autoridades.