El Gobierno de Argentina, en manos de Javier Milei, ha conseguido reducir los homicidios de mujeres en un 14,3%, los delitos sexuales en un 12,8% y los crímenes de trata en un 35,9% tras eliminar el Ministerio de Igualdad y recortar de forma drástica el presupuesto destinado a políticas de género. Así lo reflejan los datos difundidos por la Defensoría del Pueblo de la Nación y utilizados por el Ejecutivo como respaldo de su nueva estrategia basada en el endurecimiento de las penas y el abandono de lo que definen como «medidas ideológicas sin eficacia comprobada».
En un mensaje institucional emitido desde la Casa Rosada, el presidente Javier Milei ha reivindicado los logros de su gestión en materia de seguridad y ha apuntado directamente al fracaso del kirchnerismo en la lucha contra la violencia de género. Según el mandatario, durante los anteriores gobiernos se impulsaron programas «basados en simbolismos y narrativa ideológica» que no sirvieron para proteger a las víctimas ni para reducir los índices delictivos.
El material audiovisual divulgado por Presidencia no escatimó en críticas hacia los gobiernos de Cristina Fernández y Alberto Fernández, a los que acusó de «lucrar con el dolor ajeno» mediante oficinas públicas y estructuras que, a pesar de contar con presupuestos generosos, no lograron frenar la escalada de violencia. «La verdadera política pública no se basa en imponer ideología, sino en aplicar la ley», sentenció el video, en clara referencia a la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, impulsora de la política de «tolerancia cero».
Uno de los datos destacados por el Gobierno fue la caída interanual del 20% en los homicidios de mujeres si se toma como referencia el pico registrado en años anteriores. Desde el Ejecutivo atribuyen esta tendencia al cambio de enfoque: «Ahora el Estado castiga al agresor, no financia discursos», han remarcado fuentes oficiales.
En línea con esta visión, el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, ha anunciado esta semana la clausura de 13 programas heredados del extinto Ministerio de las Mujeres, entre ellos iniciativas como MenstruAR, que distribuía productos de higiene menstrual. Para el titular de la cartera, estas políticas representaban «un gasto sin resultados medibles» y su eliminación permitirá un ahorro superior a los 6.000 millones de pesos anuales.
La desaparición del Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad fue formalizada a través del Decreto 8/2023, que redujo a la mitad la cantidad de ministerios y marcó el comienzo del proceso de reestructuración del Estado. Lejos de generar un repunte en los casos de violencia, como advertían sectores progresistas, las cifras oficiales muestran un descenso en los delitos contra las mujeres durante el primer semestre de 2024.
Con este balance, el Gobierno refuerza su mensaje de que el camino para resolver los problemas de fondo no pasa por la ampliación del aparato estatal ni por discursos ideologizados, sino por la eficacia y la firmeza en la aplicación de la ley. Milei lo resumió así en una de sus últimas intervenciones: «Menos relato, más justicia».