La Asamblea Legislativa de Bolivia, dominada por el oficialista Movimiento Al Socialismo (MAS), ha aprobado el jueves una ley que impide la realización de primarias dentro de los partidos del país andino, con lo que se dificultaría el hecho de que Evo Morales pueda presentarse nuevamente como candidato presidencial de dicha organización en los comicios pautados para 2025.
Morales lleva varios meses en una disputa abierta con el actual presidente boliviano, Luis Arce, por el control del MAS y ha cifrado su cálculo político en unas internas dentro de la organización para intentar ser elegido como abanderado de la misma de cara a las próximas elecciones presidenciales.
La ley fue aprobada la semana pasada por la Cámara de Diputados y ahora ha contado con el visto bueno de la mayoría del Senado, faltando solamente que esta sea promulgada.
«Si el Lucho gana, tengo que hacer campaña por el Lucho. Si yo gano, el Lucho hace campaña por mí. Eso es hablar de unidad, estoy dispuesto porque aquí somos orgánicos, por eso desafío (a Arce) a que nos sometamos a internas», ha dicho Morales sobre su enfrentamiento con Arce, defendiendo la tesis de las primarias partidistas que ahora, con esta decisión del Parlamento, habrían quedado descartadas.
