El Mecanismo para el Reconocimiento de Personas Presas Políticas advirtió el lunes que la cifra de presos políticos en Nicaragua se elevó a 78, luego de que en su último informe, elaborado en junio pasado, reportaran 64 disidentes encarcelados en el país centroamericano.
Así, el Mecanismo denunció la existencia de «78 personas reconocidas como presas políticas a la fecha: 12 mujeres y 66 hombres (incluyendo 10 presos políticos detenidos previo a 2018)». De acuerdo a esta instancia 14 personas que habían sido liberadas han vuelto a ser encarceladas, mediando eminentemente razones políticas en ello.
El informe también recalca la escalada en la represión del régimen de Daniel Ortega en contra de religiosos, haciendo énfasis en que «En el período que abarca este informe (entre el 20 de junio y el 31 de julio de 2023) se registró la captura de un sacerdote y al menos 10 personas pertenecientes a la feligresía y/o trabajadores de ONGs católicas».
El caso más emblemático del ensañamiento sandinista en contra de la Iglesia Católica es el del obispo de Matagalpa, Monseñor Rolando Álvarez, sentenciado a cumplir casi 27 años de cárcel por «traición a la patria». Álvarez se ha negado reiteradamente a abandonar Nicaragua a cambio de ser excarcelado.
