Las autoridades municipales de Lima han anunciado el regreso al centro histórico de la ciudad de la estatua de Francisco Pizarro, que se alzará en el pasaje Santa Rosa.
Conmemorando los 490 años de la fundación de Lima, dicha escultura elaborada en bronce será colocada de nuevo.
La escultura fue obra del escultor estadounidense Charles Cary Rumsey y regalada a la ciudad por su viuda con motivo del IV centenario de la fundación de Lima.
En un inicio, su emplazamiento en el atrio de la Catedral, durante la alcaldía de Luis Gallo Porras, que consideraba a Pizarro un «héroe civilizador», provocó las quejas de la Archidiócesis de Lima.
En 1952, la figura fue desplazada al solar que dejó vacío la demolición de la casa de su medio hermano, Francisco Martín de Alcántara. Finalmente, en abril de 2003, el alcalde Luis Castañeda Lossio, ordenó la retirada del monumento y la reubicación de su estatua, desprovista de su pedestal, en el Parque de la Muralla.
«No estaba ubicada correctamente, parecía que se intentaba ocultarla. Lo que buscamos es devolverle el lugar que le corresponde, en el corazón de la ciudad», ha manifestado el gerente de Prolima Luis Bogdanovich.
La estatua está actualmente situada en el Parque de la Muralla y el paso continuo de los trenes la ha deteriorado.