El 61% de los brasileños están en contra de que se permita la legalización del aborto en Brasil, según la encuesta PoderData realizada del 27 al 29 de enero, y reiteran el carácter «provida» de su patria.
La cifra es un récord absoluto y es dos puntos superior al dato de mayo de 2022 y tres puntos más que en enero de 2021. Los que dicen estar a favor del aborto se sitúan en el 24% y el 15% responde que «no sabe».
El expresidente brasileño Lula da Silva se ha mostrado en muchas ocasiones a favor del aborto porque es una «cuestión de salud pública». «Aquí en Brasil está prohibido cuando en realidad debería ser una cuestión de salud pública y todo el mundo debería tener derecho y no tener vergüenza», manifestó. «La sociedad ha evolucionado mucho, las costumbres evolucionaron y tenemos que tener el valor para iniciar ese debate», afirmó antes de llegar a la presidencia.
El expresidente Jair Bolsonaro, por su parte, siempre dio la batalla cultural contra el aborto y reiteró su posición provida: «No cabe relativización en la defensa de la vida de los inocentes que no pueden defenderse». Y reiteró que, mientras dependiera de él, el aborto «nunca» sería aprobado y que defendería «la inviolabilidad del derecho a la vida previsto en la Carta Magna».
