Los cuerpos de los dos estadounidenses fallecidos tras un secuestro en Matamoros, en el estado mexicano de Tamaulipas, han sido repatriados este jueves a Estados Unidos, según ha confirmado el Fiscal General de Justicia de Tamaulipas.
«Concluidos estudios forenses y realizadas acciones jurídicas, los cuerpos de dos estadounidenses encontrados sin vida, fueron entregados esta tarde a autoridades diplomáticas de Estados Unidos», ha confirmado el fiscal en su cuenta de Twitter.
También ha confirmado que se han localizado cinco vehículos, entre ellos uno de la marca Lamborghini robado en Estados Unidos, en relación con el suceso, que dejó además a una ciudadana mexicana muerta por una bala perdida durante los enfrentamientos.
Las autoridades de México sospechan que el secuestro podría estar relacionado con las drogas, después de conocer que tres de ellos tienen antecedentes penales por tráfico, venta y posesión de armas en su país.
Zindell Zaquille Mckinley Brown y Shaeed Hakim Woodard, las dos víctimas mortales del secuestro tenían antecedentes relacionados con la elaboración y el comercio de drogas, robo con violencia y posesión de armas.