El reclutamiento forzado de menores por parte de grupos terroristas colombianos se incrementó en un 53% en el primer trimestre de 2023 con respecto al mismo período del año pasado, de acuerdo a cifras manejadas por la Defensoría del Pueblo de Colombia plasmadas en una carta que la institución giró a la dependencia de la Organización de Naciones Unidas (ONU) encargada de manejar los temas infantiles y de conflicto armado.
Así, durante este lapso -que coincide con los primeros meses de Gustavo Petro en el poder-, 23 niños habrían sido llevados forzosamente a entrar en grupos como las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el Ejército de Liberación Nacional (ELN).
La región del país sudamericano más afectada por estos hechos es el Cauca (suroccidente), donde se han registrado 14 casos de reclutamientos forzados. Le siguen en número de incidencias las regiones de Amazonas, Antioquia y Arauca.
La misiva de la Defensoría colombiana resalta el “alto riesgo en el que se encuentran niñas, niños y adolescentes de ser reclutados, usados y utilizados por los actores violentos”, llamando la atención sobre “una preocupante situación que seguimos evidenciando y que debe tomar relevancia en el ámbito internacional”.
