En las últimas horas, Marruecos ha iniciado una ofensiva planeada para intentar arrebatar la final del Mundial 2030 —que se celebrará en el país islámico, España y Portugal— al Santiago Bernabéu. A través de diversos lobistas que operan en todo el mundo, el régimen de Mohamed VI ha conseguido blanquear gracias a la gran mayoría de medios —políticos y deportivos— españoles el que será el «estadio más grande del mundo».
Pese a no estar ni terminado, las noticias filtradas en España el mes pasado asegurando que la final se disputaría en el estadio del Real Madrid, sumadas a la inminente decisión de la FIFA, han acelerado el transcurso de los acontecimientos, obligando al régimen a destinar cuantiosas cantidades económicas para difundir qué esconderá su nuevo estadio en medios tanto marroquíes como europeos (sobre todo, españoles).
Es por ello que, en las últimas 48 horas, portales deportivos de gran relevancia como el Marca, el AS, el Mundo Deportivo o el Sport han compartido el reportaje con un título casi similar: «Un megaestadio en Marruecos para quitarle la final al Bernabéu, Marruecos amenaza la final en el Bernabéu…».
Los medios destinados a informar, principalmente, sobre política (y de todas las sensibilidades), también han caído en la iniciativa, insistiendo en que ese «impresionante» estadio puede arrebatarnos la final. ABC, El Debate, OkDiario, La Razón, 20Minutos o El Español son sólo algunos ejemplos. Incluso digitales con relevancia mundial como la CNN han dado a conocer las «maravillas» de la edificación a sus miles de lectores.
De todo este efecto en cadena se ha hecho eco Rue20, uno de los medios afines al régimen, que ha recopilado todos los titulares afirmando que han acaparado las portadas de la prensa española. En su pieza, ya hablan de que son serios candidatos a arrebatar la gran final a España e insinúan que aquí existe preocupación: «Con todo esto, está más que obvio que Marruecos sigue en su lucha por acoger la Final y sigue trabajando con seriedad y con mucha claridad para estar a la altura y brillar como país anfitrión. Grandes proyectos se están poniendo en marcha, mucha dedicación y entusiasmo y, sobre todo, estabilidad», redactan.