Llámenlo heterogénesis de los fines o ley de consecuencias no deseadas, da igual; el caso es que el estamento político más obsesionado con alcanzar un nivel cero de emisiones de carbono ha acabado propiciando un récord en el uso del carbón para producir electricidad.
Según informa Reuters, recogiendo datos del grupo de expertos medioambientales Ember, la generación mundial de energía a partir de carbón alcanzó un nivel récord en 2023.
Según los datos de Ember, la electricidad generada a partir del carbón fue de 8.295 teravatios hora (TWh) entre enero y octubre, un 1% más que en el mismo período de 2022.
Mientras, las exportaciones mundiales de carbón aumentaron el año pasado a más de mil millones de toneladas métricas por primera vez, según datos de seguimiento de carga de Kpler. En 2023, las exportaciones mundiales de carbón térmico alcanzaron los 1.004 millones de toneladas métricas, un aumento del 6,6% respecto al año anterior.
Se estima que la demanda mundial de carbón aumentó un 1,4% en 2023 y superó un nivel récord de 8.500 millones de toneladas por primera vez, dijo la Agencia Internacional de Energía (AIE) en un informe de diciembre.
Además, los tres principales productores de carbón del mundo (China, India e Indonesia) están impulsando la producción, que está alcanzando nuevos máximos, dijo la AIE en su informe anual Carbón 2023 .
Si bien se esperaba que la demanda de carbón en Estados Unidos y la Unión Europea sufriera una caída récord del 20% en 2023, el uso de carbón en las economías emergentes «sigue siendo muy fuerte, aumentando un 8% en India y un 5% en China en 2023 debido a la creciente demanda de carbón y electricidad, y una débil producción hidroeléctrica», dijo la AIE.
