La agencia fronteriza lanzó un mensaje a las potencias europeas para poner en marcha una agenda de cooperación transnacional.
Frontex ha lanzado una alerta sobre una nueva oleada migratoria que se acerca a Europa. El Director Ejecutivo Adjunto, Berndt Körner, ha explicado que el número de inmigrantes está aumentando significativamente tanto en la parte oriental del Mediterráneo hacia Grecia como en el oeste desde el norte de África.
Según Breitbart, Körner ha mantenido que alrededor de 14,000 personas fueron enviadas en avión a sus países de origen desde la UE en 2017 y que muchos de ellos buscarían regresar a Europa a través de Turquía y hacia Grecia.
Precisamente en Grecia, el alcalde de Orestiada, alertó hace unas semanas sobre la presión migratoria que se vivía en la zona: «Nuestras instalaciones de recepción están abarrotadas y las cosas están a punto de perder el control. Están llegando muchas más personas de las que realmente se están registrando».
Más fondos
La Comisión Europea detalló su propuesta presupuestaria a largo plazo para inmigración y aduanas, que contempla casi triplicar los fondos comunitarios destinados a la gestión migratoria entre 2021 y 2027 y emplear a 10.000 guardas costeros adicionales.
«El incidente con el Aquarius en el Mediterráneo nos ha recordado, una vez más, que la inmigración no es sólo una discusión teórica. La inmigración es muy real y tangible. Y por encima de todo, afecta a los seres humanos», dijo el comisario europeo de Migración, Interior y Ciudadanía, Dimitris Avramópoulos, en la presentación.
Bruselas propone dedicar 34.900 millones de euros a la gestión fronteriza de la Unión Europea (UE), frente a los 13.000 millones presupuestados entre 2014 y 2020, período en el que las crisis migratorias golpearon a la UE a raíz de la inestabilidad en países como Siria, Irak, Libia, Eritrea o Afganistán, especialmente en 2015 y 2016 cogieron «a la UE por sorpresa».
«Aunque la situación es mucho más estable ahora, los pasados tres años nos han enseñado que no podemos permitirnos otra repetición de 2015, ni política ni financieramente. Necesitamos soluciones financieras», agregó Avramópoulos.
La CE llegó entonces a un acuerdo para entregar 3.000 millones de euros a Turquía para atender a los refugiados en su territorio y frenar la avalancha en las cosas griegas, mientras que el Ejecutivo comunitario propuso el pasado marzo otros 3.000 millones adicionales.
El nuevo plan presupuestario de la CE, que deberá ser negociado con los Estados miembros y por el Parlamento Europeo, toma como referencia la actual propuesta comunitaria de reforma del Reglamento de Dublín, que estipula el reparto de los demandantes de asilo en la Unión.