El presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela, Maikel Moreno, denunció por su parte que en el país «se está gestando un golpe de Estado», en referencia a la autoproclamación del líder del Parlamento, Juan Guaidó
El ministro de Defensa denunció un «golpe de Estado» al aludir a la autoproclamación de Guaidó como «presidente encargado», un hecho que consideró «reprochable».
La Fuerza Armada Nacional Bolivariana de Venezuela dijo este jueves en un comunicado leído por el ministro de la Defensa, Vladimir Padrino, que no aceptará a un «presidente autoproclamado» ni se «subordinará a una potencia extranjera», y rechazan los «groseros actos de injerencismo» de algunos gobiernos.
El escrito, que se produce al día siguiente de que el jefe del Parlamento venezolano, Juan Guaidó, se autoproclamara «presidente encargado» del país al no reconocer a Nicolás Maduro como jefe de Estado, señala que la FANB no aceptará «jamás» a un gobernante «impuesto a la sombra de intereses oscuros».
La institución castrense rechaza lo que considera «acciones ilegales con las que se persigue instalar un gobierno paralelo» en Venezuela, «así como los alevosos llamados de algunos sectores» para apartarla del «sendero democrático».
«Rechazamos del modo más enérgico posible los groseros actos de injerencismo llevados a cabo por gobiernos extranjeros los cuales consideramos irrespetuosos del derecho internacional y del principio de autodeterminación de los pueblos, siendo además ofensivos a la dignidad de los venezolanos», se indica en el escrito.
Asimismo, se asegura que la FANB va a garantizar «la paz ciudadana y el correcto funcionamiento de las instituciones del Estado» y no tolerará «hechos vandálicos o terroristas por parte de grupos que promuevan la violencia como perverso mecanismo para alcanzar sus fines».
Finalmente, reitera que reconocen como «legítimo presidente» a Nicolás Maduro «quien resultó electo con la gran mayoría de los votantes en elecciones libres, universales directas y secretas celebradas el pasado 20 de mayo de 2018».
Antes de leer el comunicado, Padrino denunció un «golpe de Estado» al aludir a la autoproclamación de Guaidó como «presidente encargado», un hecho que consideró «reprochable».
Acusó a «factores desquiciados» de la oposición venezolana de querer «irrumpir de una manera violenta, esquizofrénica» al propiciar un gobierno de facto que, auguró, «no va a ser victorioso».
El Supremo habla de golpe de Estado
El presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela, Maikel Moreno, denunció por su parte que en el país «se está gestando un golpe de Estado», en referencia a la autoproclamación del líder del Parlamento, Juan Guaidó, como «presidente encargado».
«Denunciamos que en Venezuela se está gestando un golpe de Estado con la anuencia de gobiernos extranjeros con un vasto antecedente de conspiración y promotores de guerra fraticida en la región», dijo el juez en un acto al que asistió el jefe del Estado, Nicolás Maduro, y otras autoridades.
En este sentido, Moreno dijo que el Poder Judicial tiene «absolutamente claro» su reconocimiento a la «autoridad legítima constituida del ciudadano Nicolás Maduro» y cree que los jueces deben «jugar un papel preponderante en la defensa de la soberanía e integridad nacional».
«Se ha promovido de forma descarada y al margen de los principios básicos del derecho internacional el desconocimiento a la institucionalidad democrática del país», advirtió el magistrado que, remarcó, no reconocerá «cualquier pretensión inconstitucional de usurpar un cargo de elección popular por vías de hecho».
Las acciones de Guaidó, consideró, tienen por objetivo «provocar la ruptura del orden constitucional» y «asaltar el poder político por la fuerza».
«A los pueblos del mundo les informamos que no habrá forma ni intento exitoso que quiebre o que pueda quebrar nuestra vida republicana», agregó a modo de respuesta a todos los países que han reconocido a Guaidó como presidente encargado de Venezuela.