«A mi hermano lo golpearon tanto que no se podía ni parar del piso», señaló.
Los familiares de un grupo de considerados presos políticos exigieron hoy a las autoridades venezolanas que permitan la realización de exámenes médicos a los detenidos.
En una rueda de prensa Ana María da Costa, hermana de Vasco da Costa, detenido el pasado mes de abril, aseguró que al momento de las detenciones tanto su hermano como otros opositores presos fueron agredidos.
«A mi hermano lo golpearon tanto que no se podía ni parar del piso», señaló.
Según da Costa, durante los dos meses que estas personas han estado detenidas no se les han realizado estudios forenses ni han recibido la atención médica que todos requieren por las lesiones que, aseguró, han sido producto de los maltratos durante las detenciones.
Dijo además que las detenciones fueron secuestros pues se llevaron a cabo sin órdenes de allanamiento y que «lo único que decían (los funcionarios policiales) era que venían por orden presidencial y que era seguridad del Estado».
Los parientes de los detenidos contaron que a todos les han imputado delitos militares como instigación a la rebelión, traición a la patria e instigación al motín.
Vasco da Costa fue detenido junto a otras once personas, entre ellas dos menores de edad, por integrar supuestos grupos dedicados al adiestramiento y la captaciones nuevas células para una banda que planeaba actos violentos contra el Estado.
Los reclamos de los familiares se producen un día después de que el Gobierno de Nicolás Maduro aprobara la liberación de 43 opositores, que se suman a otro grupo que fue excarcelado a principios de mes que según la ONG Foro Penal Venezolano (FPV) estuvo conformado por 53 personas y no por 80 como afirmó el oficialismo.
Tras las liberación de estas personas, el Gobierno dejó entrever que este es el fin de las excarcelaciones de políticos «en aras del diálogo nacional».
De acuerdo con el FPV, más de 300 políticos permanecen privados de libertad en Venezuela.
