«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
La Gaceta de la Iberosfera
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Bilbao, 1965. Periodista, máster de 'El País'. Noticias y opiniones que escandalicen a los incondicionales de lo políticamente correcto y la «memoria histórica». En la editorial Homo Legens ha publicado 'Eternamente Franco' y 'Los césares del imperio americano'. Su último libro es 'Eso no estaba en mi libro de historia del Imperio español' (Almuzara).
Bilbao, 1965. Periodista, máster de 'El País'. Noticias y opiniones que escandalicen a los incondicionales de lo políticamente correcto y la «memoria histórica». En la editorial Homo Legens ha publicado 'Eternamente Franco' y 'Los césares del imperio americano'. Su último libro es 'Eso no estaba en mi libro de historia del Imperio español' (Almuzara).

Inglaterra, colonia de sus colonizados

15 de noviembre de 2022

Dios, que es más misericordioso de lo que pensamos, libró a Isabel II de tener que nombrar primer ministro a un descendiente de esos súbditos rebeldes que despojaron a su padre del título de emperador de la India en 1948. El imperio británico de la India, conocido como Raj, duró de 1877 a 1948, unos pocos años menos que el régimen bolchevique, que se extendió de 1917 a 1991. En cambio, el virreinato de la Nueva España, abarcó de 1535 a 1820, 285 años.

El nuevo jefe de Gobierno (…) es el más ilustre representante político de la sociedad multicultural

Rishi Sunak, el vencedor de las elecciones internas en el Partido Conservador, se presentó ante Carlos III con el apoyo mayoritario de la Cámara de los Comunes para que el monarca le acepte como su primer ministro. Aunque nació en Southampton en 1980, sus padres eran indios que en los años 60 emigraron al Reino Unido desde África. Además, su esposa Akshata Murty, es hija del multimillonario indio Nagavara Ramarao Narayana Murty, y no tiene ni nacionalidad británica ni residencia fiscal en el Reino Unido para evitarse algo tan molesto como pagar impuestos.

El nuevo jefe de Gobierno no es una excepción, sino el por ahora más ilustre representante político de la sociedad multicultural, de la que Londres es el ejemplo más acabado en Europa, por encima de París y Bruselas. Una capital violenta y de precios carísimos, al que los nativos acuden por las mañanas en un transporte público destartalado a servir a millonarios árabes, chinos, africanos y rusos, y por la noche regresan a sus domicilios en las afueras.

El alcalde de Londres, el laborista Sadiq Khan, proviene de una familia de inmigrantes pakistaníes que se instalaron en los años 60. El sucesor de Sunak en el Ministerio de Economía en julio pasado, Nadhim Zahawi, nació en 1967 en Bagdad. Irak fue mandato británico entre 1920 y 1932 y luego reino controlado por Londres hasta la posguerra. El abuelo de Zahawi fue gobernador del Banco Central del país árabe.

De la elección de Sunak por los diputados conservadores cabe deducir que estos reconocen que el Reino Unido ya es un país irremediablemente mestizo

En el gabinete de Liz Truss había una ministra de origen nigeriano y otro ministro de origen indio. Quien fue gobernador del Banco de Inglaterra entre 2013 y 2020, Mark Joseph Carney, es de nacionalidad canadiense y antes de ser contratado por el emisor de la libra esterlina desempeñó el mismo cargo en el Banco de Canadá. El primer musulmán que ingresó en la Cámara de los Lores en 1998, Nazir Ahmed, vivió en Pakistán hasta los once años; más tarde, tuvo que dimitir debido a una condena por explotación sexual.

Da la impresión de que la vida en las repúblicas que engendró la descolonización en el siglo XX no es tan próspera ni segura como la prometían los caudillos de las independencias, ni sus protectores de Moscú y Washington.

Ni en India, ni en Egipto, ni en Jamaica, ni en Sudáfrica hay ministros ni jefes de Estado que sean blancos nacidos en Gales o York

Aparte de paradojas históricas y tendencias demográficas, el ascenso de Sunak muestra la capacidad de los conservadores británicos para escoger figuras políticas novedosas no sólo por sus ideas. En el siglo XIX, Benjamín Disraeli, que consiguió para Victoria I el título de emperatriz de la India, fue el primer jefe de Gobierno de ascendencia judía; y en el siglo XX, Margaret Thatcher, la primera mujer, a la que siguieron otras dos, también conservadoras, aunque mejor olvidamos a la última.

De la elección de Sunak por los diputados conservadores cabe deducir que éstos reconocen que el Reino Unido ya es un país irremediablemente mestizo, cuya identidad nacional se reduce a la corona, la libra esterlina y una comida penosa. ¿Un anticipo del destino que los poderosos reservan a Europa, al menos a la parte occidental? Porque no se encuentra semejante reciprocidad en los países de origen de los nuevos europeos, casi todos ellos riquísimos, por cierto. Ni en India, ni en Egipto, ni en Jamaica, ni en Sudáfrica hay ministros ni jefes de Estado que sean blancos nacidos en Gales o York. Curiosa asimetría que desmonta las fronteras de unos países, los más prósperos y cristianos, mientras mantienen las de otros.

Ahora que los antiguos colonizados gobiernan la metrópoli, de la gloria imperial británica sólo queda Gibraltar, para baldón nuestro. Habría que investigar qué fortunas españolas están escondidas o engordan en ese nido de piratas…

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