«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
La Gaceta de la Iberosfera
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Alfonso Ussía Muñoz-Seca. Madrid 1948 Escritor. Premios. Mariano de Cavia, González-Ruano, Jaime de Foxá y Baltasar Iban. Especial Ejército, Fundación Guardia Civil y FÍES de periodismo. 53 libros. Distinciones. Gran Cruz del Mérito Naval. Gran Cruz de la Orden del 2 de Mayo. Medalla de Oro de Madrid. Cruz de Plata de la Guardia Civil. Entre ABC, Tiempo, Época, y La Razón, más de 20.000 artículos. Pluma de Plata y Pluma de Oro.
Alfonso Ussía Muñoz-Seca. Madrid 1948 Escritor. Premios. Mariano de Cavia, González-Ruano, Jaime de Foxá y Baltasar Iban. Especial Ejército, Fundación Guardia Civil y FÍES de periodismo. 53 libros. Distinciones. Gran Cruz del Mérito Naval. Gran Cruz de la Orden del 2 de Mayo. Medalla de Oro de Madrid. Cruz de Plata de la Guardia Civil. Entre ABC, Tiempo, Época, y La Razón, más de 20.000 artículos. Pluma de Plata y Pluma de Oro.

Madrugador y tajante

14 de marzo de 2021

Por lo normal, la gente decidida y tajante es madrugadora. Salta de la cama como un leopardo cuando suena el despertador. Una tía de mi mujer – y por ende, mía-, se encontró un domingo por la mañana sin servicio doméstico. Enfermó el padre de su asistenta y fuese a Molina de Aragón para atenderlo. Se levantó, y antes de desayunar se hizo la cama. 

Y se cansó tanto cuando la hizo, que se metió en la cama de nuevo para descansar.

Sus amigos y conocidos coinciden en señalar que es más vago que el ginecólogo de la Reina Luisa Isabel de Orleans

Se contaba de don José Domecq de la Riva, jerezano, apodado en aquellas tierras maravillosas como “Pepe Panteras”. Gran devoto, comulgaba todos los domingos, y si en la fila de los comulgantes se ubicaba una mujer en el turno inmediatamente anterior al de don José, Severino, su chófer, se interponía entre ellos para que don José no fuera víctima de malos pensamientos y pecara durante el breve recorrido hasta el oficiante. Dormía don José la siesta del carnero, previa a la comida, cuando fue zarandeado y despertado por su mayordomo Malumbres. —¡Don José, don José, despierte!-; —¿Qué pasa, Malumbres?-; —Pasa que si sigue dormido no va a tener sueño para la siesta de la tarde-. Verídica historieta que nada tiene que ver con la leyenda urbana.

Íñigo Errejón, el de la beca en la Universidad de Málaga, es tajante y decidido, como buen madrugador. Sus amigos y conocidos coinciden en señalar que es más vago que el ginecólogo de la Reina Luisa Isabel de Orleans, esposa del brevísimo Luis I, el Bien Amado o el Breve, que reinó durante siete meses. El pueblo deseaba un hijo y la Reina Luisa Isabel no se quedaba embarazada. Un poeta malvado le escribió:

                 Parid, bella Flor de Lis,

                 En situación tan extraña,

                 Si parís, parís a España,

                 Si no parís….¡A París!

Errejón considera que levantarse del lecho a las 10 de la mañana es madrugar. Por eso se incorpora con el gesto agudo, la mente inteligente y enciclopédica y la decisión tajante. Y lo ha dicho: “No voy a consentir que el 4 de mayo haya elecciones en la Comunidad de Madrid”. Su seguridad y su empaque han causado un pavor desmedido. Recién levantado, Errejón ha prometido que impedirá la celebración de las elecciones. Lo que se dice, un tío.

La valentía y la prudencia en Errejón son –como diría la Chiqui del Gobierno-, como el agua y la sal, que no pueden mezclarse

Según sus más allegados, el despertador de Errejón se alborota a las 10 de la mañana de lunes a viernes, y a las 11.30 los días de asueto. No pierde el tiempo en afeitarse, porque es más pelusa que barba lo que le crece en el mentón, se cepilla los dientes entregado al desánimo, procede al pipí mañanero, y ya, elegantemente vestido y nada colonizado por las lavandas, acude al Parlamento de la Comunidad de Madrid coincidiendo con la salida del resto de los parlamentarios. Es ahí cuando decide, en la grandeza de la soledad, lo que va a consentir y lo que se propone prohibir en toda la provincia de Madrid. Hay que reconocer que, madrugue o no, —la madrugada se presta a todo tipo de interpretaciones—, en España estamos muy necesitados de políticos de ese cuajo y coraje. Se convocan unas elecciones, se establece el día, se conforman las mesas electorales, se reparten las urnas por los colegios y puntos de votación, y cuando la ciudadanía se apresta a cumplir con su voluntario derecho democrático, llega Errejón y no lo consiente. La valentía y la prudencia en Errejón son –como diría la Chiqui del Gobierno-, como el agua y la sal, que no pueden mezclarse. Y si no lo creen, pregunten a las merluzas y los besugos que desde que no se pueden mezclar el agua y la sal están indignados, y con razón.

Por esta vez, el universitario becado en Málaga, lo consienta o no, se va a llevar un susto y un disgusto, o ambas cosas simultáneamente

Pero intuyo que en esta ocasión, aunque Errejón no consienta la celebración de elecciones en la Comunidad de Madrid, el madrugador se va a ver obligado a permitirlas. Y es muy probable que su partido mengüe en representación, porque a su esforzado trabajo, a su tajante carácter y su decisión heroica, hay que añadir que Errejón no ha hecho otra cosa como diputado autonómico que una chorrada detrás de otra.  Y eso la gente lo termina por notar, o al menos, intuir. Otra cosa es Rita Maestre, su número dos, que al lado de Errejón parece inteligentísima y trabajadora, lo cual resulta a todas luces sorprendente.

Por esta vez, el universitario becado en Málaga, lo consienta o no, se va a llevar un susto y un disgusto, o ambas cosas simultáneamente. 

Y se lo escribo con mi admiración de siempre.

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