Carlos Sainz y Lucas Cruz, campeones del Dakar 2024, llevaron un sacerdote en su equipo. Los dos pilotos españoles, tándem inseparable, se coronaron el pasado 19 de enero como líderes del campeonato de rallies más exigente del mundo. «Sin Lucas, no hubiera ganado este Dakar», reconoció Sainz hace apenas unos días. Y hoy Cruz ha reconocido que sin su sacerdote no habrían ganado tampoco la carrera.
En una entrevista, el compañero de Sainz ha revelado que el equipo Audi llevaba un sacerdote entre todo el personal de la escudería. «Dani Gratacos es el ingeniero de Ekstrom. Pues sus hijos van a un colegio religioso. Allí hay un sacerdote que se ha ordenado hace poco, un checo. Cuando se enteró de que Dani estaba en las carreras, le dijo que su ilusión era haberse meterse en el automovilismo deportivo, «pero me dio un aire, y me hice cura«. Así que Dani «le animó a venir», ha comenzado diciendo Cruz.
Durante sus declaraciones, Cruz también ha explicado que «el hombre se puso como loco. Y le metió como chófer de una autocaravana del equipo Audi. El tío, encantador, muy majo. Entonces Carlos le pidió que bendijera el coche, lo hizo y, ya te digo, nos fuimos salvando de todos los colores en este Dakar. Todos los demás coches sufrieron problemas«.
Así, entre risas el copiloto campeón del mundo achaca a este sacerdote checo su suerte durante la competición: «Este año nos han pasado las balas por todos los lados, desde el punto de vista técnico. No sé si es porque llevábamos un cura en el equipo, que nos bendijo el coche y nos salvó la papeleta«, ha zanjado.
