La ONU se empeña en recordarnos que más allá de su ineptitud burocratizada, también es sierva de ideologías concretas como la ideología de género.
Jardiel Poncela habría disfrutado de nuestra época y de nuestra España, si lograra esquivar la censura, porque era un gran estudioso de la idiotez humana
Hasel, un delincuente reincidente, merece el desprecio de los demócratas y el reproche judicial por enaltecer el terrorismo y humillar a las víctimas.
El escritor y músico underground Ibn Asad escribe una carta al rapero condenado Pablo Hasel. Una carta que hay que leer despacio y hasta el final.
"Ningún mozalbete progre lobotomizado por la propaganda de la prensa servil, podrá convencerme nunca de que no vi lo que vi ni viví lo que viví".
La libertad de expresión no puede estar reservada sólo para las informaciones o ideas bien acogidas, inofensivas o indiferentes.
Importantes políticos e incluso empresarios han levantado la voz para reclamar que cualquiera pueda expresar sus ideas sin miedo.
El líder de Vox, Santiago Abascal, ha condenado en su cuenta de Twitter que las grandes compañías tecnológicas se hayan convertido en "policías globales del pensamiento".